agua atomizada

por Naikodemus

Súbete a la moto. Con ella y la sedación de la música distorsionada te llevaré al fin del mundo. Allí nos desvaneceremos, difuminados en una película de agua atomizada. Nuestros excuerpos se entremezclarán. Nuestas inexistentes consciencias se preguntarán dónde leches estamos. La desorientación absoluta se revelará como el conocimiento supremo.

Querremos volver. No se puede desde el fin del mundo. No hay ningún lugar al que ir. Anubis y Hefestos nos abrirán la puerta de ningún lugar. Descubriremos que siempre hemos estado allí. Y como Osiris, recogeremos cada gota de nuestros cuerpos para reinar sobre la lluvia, las notas musicales, el rocío de la noche, la niebla y la condensación en la ventanilla de los coches.

Ven conmigo.